jueves, 26 de diciembre de 2013

Manhattan

El reflujo descubre al lecho del mar; es una cicatriz que guarda
la historia de un dolor desproporcionado. Sobre ella gira un
trompo, y con cada vuelta se desbordan las diásporas en la
esquina convergente de la pequeña isla de Manhattan.
Entonces, algunos penetran al denso humo que sale de las
alcantarillas, algunos pierden el semblante en aquél lugar
desgarrado de Dios.

~ CAOS

Su dolor amorfo se hunde en túneles
 en la visión veloz
de un tren que descarría
en el prisma de los pronombres
  en la alegría perpetua de ríos híbridos
que chispean la música

 el latido contuso de la sangre.

Mi corazón
un hueco

 un agujero negro
¿qué símbolo me devolverá el alma?

martes, 24 de diciembre de 2013

EL INMORTAL

"A dónde iré con esta memoria
enferma de amnesia irreversible?
¿Qué bálsamo hallaré para que alivie
la soledad que desde la raíz de mi carne nace?"

Rafael Valdemar ~ fragmento del poema "Evocación"




Irás a la tierra del Olvido, a recordar. Traerás en las manos el documento fiel de tu caligrama y el pan de los niños, como siempre, debajo del brazo. Voltearás a ver, y no habrá una columna de sal que te martirice el resto del camino. Tu mapa es la nieve, pero es en el incendio del bosque que te espera el árbol de Silverstein, en su tocón, siéntate, que los pies te arden, el corazón se te sale por la boca. No temas sacarlo y arrullarlo como a pájaro manso que tiembla herido. Estas cosas son y fueron escritas, pero no como tú harás en la higuera. Ve con paz, la raíz de tu carne y mi carne es hueca. A veces verás las orquideas crecer de su veneno, pero no temas llevartelas al pecho y frotarlas como símbolo de tu pureza, ellas son indefensas, marchitan. No me creas una sola palabra, cállame con tu espalda y sigue la voz del río que atisba en la distancia. Al llegar observa el gorjeo del agua, y los pájaros de agua que simulan peces pero que nadie ha visto, y dudarás. Quizá es una ilusión, un desvarío mortal que se desploma a llorar sobre la tumba del cielo. Un desangelado frío en la nuca, que estrangula en el tallo cerebral, y sí, produce una lluvia fina que traspasa fantasmal al dolor, y allí inclínate a su latir. No partas, la noche espera intermitente, te quiere, te necesita en su órbita porque conoces su túnel y sin alas vuelas. Pero no es todo. El absoluto destello de una estrella al morir es eso, un poema que se abre solitario y entonces quién lee?

E. R. Aristy





 

La traba


La tarde cruje
como los ojos de un león moribundo.

Llueve con furia sobre la piel de mayo

y a mi se me hinchan las puertas.


Tarde vinculada de tantas otras tardes,
oriunda de un adónde los hombres
crepusculares se adentran
en la lengua tensa y la devoran.

Sin embargo, yo no puedo.

Yo soy el fulgor asfixiado en la mácula,

el león mordído por el cienpiés de las horas,
el follaje saciado de luz,

entreabierto e inexcusable
como mi sed.

POESIS









A la Poesía




 He de venir a tí como a un lago
a hundir mi rostro,
dudo seas mi reflejo.

Si en la iconisidad esculpió
el cuento su verdad,
mi mentira,
viene a romperse en tu espejo.


E. R. Aristy

ALMA



Todo es más pequeño cuando nieva,
toma relieve sobre la virgen capa,
en lo alto de la vieja cúspide,
 silbilante
despega el gallo en su mudo vuelo,
con su piel de braille,
el viento, o la luz si se hicieran más frágiles,
 igual,
romperían el eje de las manos.
 Tomaría-tan sólo- para redimirlas el color
 que hacen las flores al mullir sus alas,
al  caer rendidas en el alma.

lunes, 23 de diciembre de 2013

CERCUEIL D'OR


Y llegó el día que de una acera a la otra cambia el tiempo.
Una verdad emergente se calcifica y se hace una calzada angosta
en la ciudad de los inmortales.

Tan sólo a la vuelta de la manzana
se puede asistir a la convocatoria del Poema. 

Un puñado se anida,
y otro vuela,

son aves del mismo pesar. 

Al cruzar empezó a caer granizos,
 y la sangre de mi cráneo pinta la máscara de Dios.

Sentí el piso moverse bajo mis pies,
 una procesión de escarabajos relucientes me cargaba cuesta arriba,
hacia las ruinas del Palacio de Bellas Artes.

  Es un viaje de malamuerte,
hediondo a las imputaciones que le echan a Dios,
 y por otro lado, ese ruido odioso
que hacen al rozar sus cajas doradas,
 por momentos, me enloquece.

EPÍFISIS

Yo era la noche; un esbozo que caía encima de todo.
Una recoleta de pobres en mid-town. Un jardín japonés
oculto en una glándula. Yo era la revelación del verso copioso de luz.

HORA INSEPULTA

Que me perdone el poeta culto,
y el roedor de libros,
que me perdone o me condene el tiempo,
para mí es igual, pero no en la hora insepulta.


Hora de cruces inmemoriales,
de concreciones y centífrugos torbellinos,
¿qué proyectas?


Preponderante, volátil ola de desconciertos,
desangran tus manos
agarradas a las barras del trapecio.


 Hora de cuarzo, de preciso pulso,
dede el prisma de tus recesos induces,

contráctil, la dilatación de la era
del desvelo.


Todo no está escrito, ni debiera.





LETRAS



Mi verso atraviesa telúrico, lleva en sus manos una desraízada
flor, en su verdor hay un zumo de diásporas inquietantes. Errabunda verdad de pétalos numinosos. ¿ Quién me va a decir qué es Poesía, si mi flor retoña en el vientre de las incertidumbres, y en la misma luz engarza su cosmogonía ?
Acordes disonantes, y sin embargo, su fuego abre la validez de otra música. Mudo verso a verso mi corola de carne, he aquí, la desnudez de mi corola mística.

AMISS


El viaje de las tormentas es un nido de preguntas
que viene a transformar, y que al igual que las respuestas,
 no contestan porqué la más débil de las luces
se aposenta a propósito en la intensa oscuridad.
 Cuando casi todos andan ocupados en brillar,
 la marea indomable rinde cuentas,
 y nos trae irrealidad.

Pero en breve,
otro evento empieza ya,
y se ensarta en el eje de aquello que queremos
 – como a un hímen- llamar virginidad.

Cuanto más oculta la desilusión,
más imposible de filtrar el desconsuelo que cimenta la Pasión en su diacrónico vuelo;
erráticas construcciones incomparables al imposible Poder,
 cuyo latir embriónico es un ejambre que cae de la rama,
y esa es la señal, cualquier cosa, como yo, fuera de lugar.

Y sí, querido Asimov, era mi costumbre concederle el paso a la prepotente Tiniebla,
y de hecho, ahí va,
me precede como la negrura que cierra al Cielo presagiando una tormenta.

Falling of the drop

La noche grávida y de uvas oscilantes me invita a ayunar,
acepto el turbio desafío de mi vulnerabilidad,

rehúso de que sea únicamente así;

avasalladora provisión
que nos desteta del amor natural,
y nos soborna con sus senos subyugantes.

Quizá sea intoxicación divina,
néctar que sin purificación, envenena,
en el ablutio, ¿nos hace divinos?


De todas formas mi madre es la muerte,
mi hambre es morir en la boca de Dios.

Morisoñando

En algún momento se inició mi travesía entre dos mundos,
la brecha contráctil que da a luz mi suceso.

 El reloj
 tic tac
inconsecuente

 rueda y se desarma.

La noche, que tantas veces me digirió en su boca, me vomita.

Cambié mi centro reflexivo; ese espejo en que el yo se ve,
mitad muerto, mitad vivo. Yo soy para siempre. 


Mi viaje onírico a veces parte desde la pierna ulcerada de Bibín,
su olor a cera dulce persiste aún en los espacios. Su recuerdo
es un emblema de palmas desteñidas en el marco de la puerta
que musita: ¡misericordia, Señor, misericordia!

(Con la certeza de una flecha perdida,ensarta mi alma,
discurre por la brecha de una ecuación en la que yo soy el símbolo
impredecible, la disipación de las vanas palabras, el holismo
de todas mis partes rotas). 
 


"A thing with Feathers"

Oigo al Tiempo llevarse en su espiral los azulejos, la noche está en vela. Desde una periferia incierta, la aguja de Cronos es certera, vacía mis ojos, me hace vomitar un constelado dolor,
una MetaPoesía se quema en mi garganta, y cambia la topografía de los hemisferios que ocultan mis sienes. Como una aparición delirante, escarbo, buscando a mi
Esperanza en el desordenado furor de las estrellas,
que al morir, empañan la ruta de un monstruoso espejo.

TEATRO

Desde mi infancia, las apariciones y desapariciones de personajes crearon sin cuestionamiento una realidad caótica, y de ese hueco emanó todo el misticismo.